El variador de frecuencia en el punto de mira

El variador de frecuencia en el punto de mira

El uso de variadores de frecuencia para el control de las bombas se ha convertido en el nuevo estándar dentro de nuestra línea de equipos de termorregulación «MATIC», permitiendo ajustar la potencia de bombeo según la demanda real del proceso.

Pero ¿qué significa esto en la práctica y qué ventajas aporta en el día a día del cliente?

Nuestro equipo técnico lo explica.
 

¿Cuál es la función de un variador de frecuencia en un equipo de termorregulación?

El variador de frecuencia regula la velocidad de giro de la bomba transformando la frecuencia de red en una frecuencia variable.Nuestro innovador sistema de control IRIS abre nuevas posibilidades al integrar completamente el variador en el algoritmo de control de temperatura. En el modo ECO, el sistema puede operar el equipo automáticamente en su punto de funcionamiento óptimo. De forma alternativa, es posible regular el caudal con gran precisión o definir directamente la potencia de la bomba deseada. Si se requiere, el usuario también puede configurar una presión máxima de trabajo.

La clave está en que la bomba no funciona constantemente a plena carga, sino a la velocidad necesaria para cada aplicación. Cuando la demanda de calefacción o refrigeración es baja, la velocidad se reduce; si se necesita una alta potencia térmica, la velocidad de la bomba aumenta hasta el punto de operación óptimo.
 

¿Qué ventajas concretas tiene esto para el cliente?

En la práctica, destacan especialmente los siguientes beneficios:

  • Eficiencia energética: El consumo eléctrico se reduce de forma significativa, ya que la bomba solo trabaja a plena carga cuando el proceso lo requiere
  • Mantenimiento y confort: Menor desgaste mecánico, intervalos de mantenimiento más largos y una notable reducción del nivel sonoro
  • Rendimiento: Todas las bombas pueden funcionar ahora hasta 60 Hz, eliminando las limitaciones por frecuencia de red. Esto resulta especialmente útil cuando, con el paso del tiempo, se produce desgaste en los componentes de la bomba: el aumento de frecuencia permite compensar parcialmente la pérdida de rendimiento. Así, el variador garantiza una potencia de bombeo casi constante durante toda la vida útil del equipo
  • Instalación eléctrica: El variador permite un arranque suave de la bomba sin picos de corriente, lo que prolonga la vida útil de los componentes eléctricos y reduce la carga sobre la red de alimentación
  • Control preciso: El caudal puede regularse ahora de forma exacta y estable


¿En qué aplicaciones resulta especialmente ventajoso el uso del variador?

En general, en todos los procesos dinámicos, donde las condiciones cambian constantemente: temperaturas variables, caudales fluctuantes o demandas térmicas irregulares. En estos casos, el variador muestra todo su potencial.

Pero incluso en procesos más simples, el variador aporta ventajas claras. Por ejemplo, durante un calentamiento rápido a plena potencia, seguido de una fase de mantenimiento de temperatura con potencia reducida y ahorro energético.

El beneficio aparece siempre que las bombas están sobredimensionadas para ciertas condiciones de trabajo, algo habitual en ingeniería, donde se aplican márgenes de seguridad para cubrir picos de carga.

Los sectores típicos donde más se aprovecha esta tecnología son:

  • Transformación de plásticos
  • Procesos de caucho y fundición a presión
  • Aplicaciones especiales en las industrias farmacéutica y alimentaria


¿Llevan todos los equipos Tool-Temp un variador de frecuencia de serie?

Todos los modelos de la línea «MATIC» están equipados de serie con la última tecnología de variadores de frecuencia. La regulación adaptativa de la bomba se consigue gracias a la integración total del variador en nuestro sistema de control IRIS, desarrollado internamente.

Los equipos de la línea «CLASSIC» no incorporan variador de frecuencia. Estos equipos convencionales siguen siendo una opción fiable para muchas aplicaciones estándar. Sin embargo, para procesos más exigentes, los equipos «MATIC» ofrecen claras ventajas en eficiencia, precisión de control y flexibilidad operativa.


¿Qué recomendación se da a los clientes que dudan entre un equipo CLASSIC o MATIC?

Recomendamos analizar los requisitos específicos del proceso junto con nuestros especialistas comerciales, preferiblemente en una reunión de asesoramiento. La elección entre un modelo CLASSIC o MATIC depende en gran medida del tipo de proceso productivo, las condiciones de instalación, las exigencias de precisión de control y el nivel de flexibilidad deseado. Junto con el cliente, encontramos siempre la solución más adecuada y rentable para garantizar una regulación térmica estable y precisa, máxima eficiencia energética y seguridad total en la producción.